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Soluciones a la crisis de los gases refrigerantes fluorados

Gases fluorados instalaciones frioEl año 2018 comenzó marcado por la crisis de la escasez de gases refrigerantes que está provocando un grave desajuste entre la oferta y la demanda. Esta situación afecta a importantes sectores productivos de la economía española, grandes usuarios de frío que se enfrentan a subidas de precios muy relevantes –con el consiguiente incremento de los costes operacionales- y a un posible desabastecimiento.

Antes de abordar las soluciones que presenta la industria del frío, cabe recordar los motivos que han causado esta situación. La escasez de refrigerantes viene derivada de dos circunstancias principales. El primer factor es la normativa europea –el Reglamento F-Gas- que este año da una nueva vuelta de tuerca a la reducción de la venta de gases HFC de alto impacto medioambiental - especialmente los gases HFCs R-404A y R-507A, que prácticamente desaparecerán- y la escasez de fluorita.

El segundo motivo de la crisis, es la escasez de fluorita -un componente básico en la fabricación de gases fluorados como el R-125 y el R-32, así como en las mezclas que los contienen- añadido a una serie de dificultades técnicas y medioambientales en China, ha afectado en este país a la fabricación de gases fluorados. Situación que se extiende a los fabricantes occidentales, ya que las materias primas y mezclas son generalmente importadas desde China, influyendo ya en la disponibilidad de algunas mezclas y al constante aumento de precios.

Carrera contrarreloj a la búsqueda de soluciones

La industria de la refrigeración y de la climatización ha iniciado una carrera contrarreloj en la búsqueda de gases refrigerantes alternativos y en el desarrollo de sistemas, como aquellos que usan CO2 y amoniaco, que presenten un menor o nulo PCA (Potencial de Calentamiento Atmosférico) y también los conocidos como refrigerantes naturales.

El reto es conseguir que estos sistemas sean igual de eficientes desde el punto de vista frigorífico, al tiempo que presenten buenos índices de eficiencia energética y costes operativos asumibles. El principal problema viene derivado de que no todos los refrigerantes comercializados en la actualidad disponen de un sustituto directo de menor PCA. Además, los usos y aplicaciones de algunas de las nuevas alternativas del grupo L2 (ligeramente inflamables) están restringidos a la espera de la aprobación y publicación de un nuevo reglamento de seguridad que modifique su tratamiento.

Ante esta situación, la recomendación de AEFYT es que los usuarios finales pregunten a sus proveedores sobre la disponibilidad de gases refrigerantes; además de advertir a éstos de no caer en la tentación de acudir al mercado negro como base de aprovisionamiento. Cabe recordar que los gases que llegan a través de canales opacos no ofrecen garantías de seguridad ni de rendimiento de los equipos.

Apostar por el reciclaje en estos momentos es una buena opción para ahorrar en la adquisición de gases refrigerantes nuevos, teniendo en cuenta, además, que la tasa del impuesto IGFEI que se aplica en los mismos tiene una reducción del 15%. Así mismo, evitar fugas es, ahora más que nunca, una necesidad económica y medioambiental. El desarrollo de sistemas automáticos de control de fugas es una tecnología más que viene a prestar apoyo a la industria del frío.

Irregularidades legales y técnicas

En paralelo a la escasez de refrigerantes y probablemente como consecuencia de los desajustes mencionados anteriormente, AEFYT está detectando un aumento de irregularidades legales y técnicas como la reutilización incontrolada e inadecuada de refrigerantes procedentes de instalaciones desguazadas y una casi nula destrucción, reciclado o regeneración de refrigerantes.

Esto deriva en un descenso de la eficiencia energética de las instalaciones con el consiguiente incremento de emisiones de CO2 de origen indirecto y posibles problemas de seguridad.

Por lo tanto, el llamamiento es optar por la reutilización, el reciclaje y el control como claves de buenas prácticas en el tratamiento de los gases fluorados y una de las soluciones que ayudarán a la industria a proteger el medio ambiente y a facilitar la transición hacia las nuevas alternativas.

Artículo realizado por Roberto Solsona, presidente de AEFYT, Asociación de empresas de frío y sus tecnologías


 

 
Modificado por última vez enMiércoles, 16 Mayo 2018 13:32

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