El control solar y los cambios en el sector de la construcción | Mesa Redonda Rebuild

En el presente artículo, os mostramos algunas de las conclusiones que surgieron de este encuentro, que puedes ver completo en el siguiente vídeo:

La fachada actual

Las fachadas actuales de los edificios que existen en el parque de viviendas español, e incluso los que se construyen de obra nueva, son fachadas fijas. Una fachada fija es aquella que no se adapta al tiempo atmosférico y que permanece fija durante toda la vida útil del edificio. La fachada es la piel del edificio y la parte más sensible son sus huecos. Los dispositivos de sombra estáticos son muy útiles, pero se pierde la adaptabilidad que permitirían soluciones adaptativas de la fachada, que hacen una mejor gestión de la energía y del confort de las personas. El sector tiene por tanto el reto de enfocarse en la adaptabilidad, sobre todo los países con climas cambiantes.

La transmitancia, el aislamiento, la resistencia térmica… son conceptos familiares en el sector profesional, pero con la radiación solar, a pesar de que existan herramientas, los mecanismos son menos conocidos y conllevan hoy en día cálculos más complejos que realizar.

Para que suceda este cambio, los arquitectos deben escuchar al sector profesional. Actualmente, la gestión que se realiza de los huecos es mucho más dinámica en comparación con la parte ciega. Pero cuando pensamos en si ese dinamismo podría aplicarse a la fachada, nos encontramos con una situación interesante: por una parte, existe mucho desconocimiento al respecto y, por otra, también mucho margen de mejora en la gestión de la radiación solar en los edificios. ¿Cómo se podría incidir en ese margen de mejora y encontrar soluciones interesantes para los edificios del futuro?

Un sector con posibilidad de cambio

El sector de la climatización, a diferencia del de la construcción, ha tenido cambios disruptivos en los últimos 15 o 20 años. Tecnologías revolucionarias y nuevas que han obligado a todos los agentes del sector a tomar decisiones arriesgadas. En cambio, al sector de la construcción parece que este tipo de cambios disruptivos le cuestan más. Se es más inmovilista al respecto y cuesta encontrar tecnologías que cambien las normas del juego.

Pero la digitalización y la inclusión cada vez más evidente de elementos domóticos inteligentes en los edificios abre la posibilidad a que sucedan cambios importantes.

Como ejemplo, Álvaro de Gracia, Profesor investigador del Departamento de Ingeniería Industrial de la UDL, presentó en la conferencia un prototipo de fachada adaptativa muy novedosa. La idea es colocar en el interior de la fachada una solución a través de una cinta transportadora. Esta solución se instalaría en un hueco de la fachada, igual que ahora las fachadas SATE llevan una cámara de aire. Ahí se colocaría una cinta transportadora que llevaría incorporados unos tubos con un material que absorbe calor y cambia de fase, permitiendo jugar con la acumulación del calor en base a las necesidades de la vivienda.

Es decir, esta cinta rotativa nos permite hacer que los tubos estén más en contacto con la climatología externa o que estén más en contacto con la vivienda. En invierno, durante las horas de radiación, se colocan los tubos por la zona exterior de la cinta, lo cual haría que quedasen más expuestos a la radiación solar, permitiendo que almacenasen calor durante todo el día. De forma que cuando llegue la noche, la cinta vuelva a rotar y ahora los tubos calientes quedarían en la parte interior de la fachada, liberando el calor acumulado a la vivienda y permitiéndonos ahorrar en calefacción.

En verano, la cinta haría que los tubos descargasen el calor por el exterior durante las horas nocturnas, de forma que podamos utilizarlos a bajas temperaturas durante el día para que fueran absorbiendo el calor del interior de la vivienda, refrescándola. La idea es tener una “fachada radiante” rotativa que aproveche la acumulación de calor en beneficio del ahorro de la vivienda, convirtiendo el interior de la fachada en un intercambiador de calor por acumulación.

Pero claro, para que esto funcione, es necesaria una programación inteligente a través de la domótica, para saber cuándo el sistema debería trabajar y cuándo no, para así evitarnos pérdidas y que la cinta transportadora trabaje en contra de nuestros intereses térmicos. La tecnología BIM puede ser clave para implementar este nuevo tipo de tecnologías en la fase de diseño de los edificios.

La importancia de la radiación solar en el balance de energía

María Moya, Responsable de Formación ES-SO, ha hecho mucho énfasis en la importancia del aprovechamiento y de la gestión de la radiación solar que incide sobre las viviendas.

A través de los siguientes gráficos, uno de un día de invierno y otro de verano, se puede observar el gran impacto de la ganancia solar, tanto en la demanda de aire acondicionado en verano, como en el ahorro de calefacción en invierno.

Como se ve, el área de la demanda de aire acondicionado depende casi en su totalidad de la radiación solar entrante en la vivienda, haciendo que sea un factor determinante en el calentamiento de la casa y las altas temperaturas que después debe rebajar el sistema de aire acondicionado. Por ello, evitar dicha radiación solar en los días calurosos sería una excelente herramienta de ahorro.

En cambio, en invierno se ve cómo el área que debería cubrir el sistema de calefacción es sustituida por la radiación solar, demostrando que es un elemento que puede hacernos ahorrar también en calefacción.

Además, a la hora de utilizar los programas de cálculo y certificación, muchos profesionales no utilizan la variable del factor solar que permiten programas como HULC, CERMA o C3X. Aplican un valor estándar para los elementos de control solar, como los de sombra, sin valorar la posibilidad de que ese elemento pueda variar. Es decir, es realizar el cálculo de la demanda de refrigeración de una vivienda como si la persiana estuviera siempre levantada. Por ello, el CTE empieza a contemplar esto en sus manuales y existen tablas orientativas para hacer estos cálculos para saber qué factor debemos introducir en el software, aunque los programas aún no permiten hacerlo fácilmente. Tener en cuenta este factor, puede hacer que la calificación energética de la vivienda mejore.

Por lo tanto, la ganancia solar es un elemento diferencial para las viviendas que el sector de la construcción no está sabiendo aprovechar. Una variable con un potencial muy grande para hacernos ahorrar tanto en calefacción como en aire acondicionado, reduciendo las demandas casi a cero, pero que se está dejando de lado.

La actualidad de la industria

Elena Broncano, Arquitecta y Responsable de Prescripción Bandalux, nos habla del papel de Bandalux y de su compromiso con la creación de cortinas y elementos de sombra que se apliquen, no solo a viviendas, sino también a edificios terciarios como hospitales, oficinas o polideportivos. Los arquitectos y diseñadores trabajan diseñando una estrategia de luz propia para cada proyecto y haciendo un acompañamiento a lo largo de la vida útil del proyecto.

Bandalux hace también un trabajo de divulgación, para hacer llegar a los usuarios y profesionales la importancia de utilizar una cortina técnica en sus proyectos. Las cortinas pueden ser un elemento clave también en la certificación energética, aportando un extra muy importante en ámbitos de eficiencia energética. Es uno de los elementos que puede ayudar a regular lo comentado anteriormente, en referencia al aporte de la ganancia solar, beneficiando mucho el balance energético del edificio y permitiendo el ahorro.

Además, muchos arquitectos suelen ser reacios a utilizar estos elementos de sombra por miedo a afear la estética del edificio, cuando después, muchas de las soluciones improvisadas que toman los usuarios de los edificios sí que desmejoran la estética del edificio, tapando las ventanas con elementos que no son constructivos y afeando la fachada.