La forma de construir los edificios en la actualidad ha evolucionado considerablemente en los últimos 40 años. Todo ello como consecuencia de la evolución de la técnica en la construcción y sobre todo, debido al aumento de las exigencias normativas. En lo que respecta al aislamiento térmico y acústico de los edificios, la publicación del Código Técnico de la Edificación (CTE) en 2006 y sus posteriores modificaciones, han supuesto un antes y un después en este sentido. Un factor muy a tener en cuenta, por ejemplo, en el diseño y construcción de edificios de viviendas.
El CTE, norma actual para el diseño y construcción de edificios, determina los requisitos básicos de seguridad, habitabilidad y funcionalidad que la Ley de Ordenación de la Edificación (LOE) establece como objetivos de calidad en la edificación que la sociedad demanda. Esta norma atiende, entre otros requisitos fundamentales, a las exigencias básicas de aislamiento térmico y acústico de aplicación en los diferentes elementos constructivos que conforman los edificios: suelos, fachadas, cubiertas, tabiques, medianeras, ventanas y particiones interiores ya sean horizontales o verticales.
En este artículo nos vamos a centrar en el aislamiento térmico y acústico para suelos en los edificios, dedicando un apartado especial a las soluciones industrializadas que existen en el mercado.