El mercado de la biomasa: una energía clave que ha superado la crisis de materias primas

Agradecemos su participación en este Pulso al Mercado a:

• Federico Muñoz, Director General Adjunto de CEIS (Centro de Ensayos, Innovación y Servicios)
• Roberto Bravo, Presidente de Apropellets
• Jorge Herrero, Director de Proyectos de AVEBIOM
• Antonio Molina, Director General de Denia Stoves

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La evolución del mercado de la biomasa en los últimos años

2022 fue un año especialmente atípico y extraordinario, a pesar de que empezaba a normalizarse el mercado del pellet en nuestro país. Se han juntado varios factores, entre ellos el de la convulsión que ha existido en el mercado de la madera, que, como todas las materias primas, ha sufrido una tensión importante. Se ha globalizado esa tensión a nivel mundial y el mercado de la madera, que normalmente suele ser bastante local, este año se ha visto influenciado por esa convulsión mundial en cuanto a disponibilidad y por supuesto, en cuanto al coste de las materias primas, explica Roberto Bravo, Presidente de la Apropellets, Asociación Española de Empresas Productoras de Pellets de madera. "La crisis energética que hemos sufrido este último invierno se ha trasladado también al mercado del pellet, porque no dejamos de ser un combustible. También debido al incremento de costes energéticos de electricidad y de costes logísticos que tienen que ver con el precio del gasoil, del petróleo".

Antonio Molina, Director General de Denia Stoves, nos recuerda también la escalada real sufrida en cuanto a costes de energía eléctrica y gas, que ha hecho que las facturas que las familias han tenido que pagar hayan sido tremendamente elevadas, no solo en España. Molina también achaca como motivo del desajuste en los precios sufrido el último año en el sector de la biomasa, en concreto del pellet, al impacto de la guerra en Ucrania. “Primero, en cuanto a los precios se refiere, y segundo, en cuanto al temor que había a quedarte sin suministro de este tipo de energía”. En cambio, el precio de la leña ha mantenido una mayor estabilidad. Molina resalta en el caso de la leña la “independencia” que aporta al usuario. “Tienes una fuente de calor permanente en tu casa por poco dinero y del que no dependes de ningún otro proveedor. Hay proveedores de leña. Pero hay gente que va al bosque, y recoge su propio combustible natural”.

Desde AVEBIOM, Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa, Jorge Herrero complementa esta visión sobre el último año del sector. “Nunca antes habíamos tenido tantas oportunidades de negocio, aunque la verdad es que la producción tanto de biocombustibles como de equipos está teniendo vaivenes en los precios, en la capacidad de conseguir componentes, en los costes energéticos, que están generando muchas dudas a las empresas a la hora de fabricar y de poner en el mercado los productos”.

Para algunos fabricantes de equipos, la situación les ha empujado a ampliar capacidades de producción. “Se han dilatado los plazos de entrega, pero desde el punto de vista del mercado ha funcionado muy bien, porque ha habido una gran demanda que quizá este año afloje un poco. Pero esperamos que 2023 sea un año igualmente bueno”, añadía Antonio Molina. 

Otro punto de vista importante para valorar la evolución de este mercado nos la ofrecen desde CEIS, Centro de Ensayos, Innovación y Servicios. Para Federico Muñoz, Director General Adjunto, ha habido un impulso importante en el sector para dar cumplimiento a los nuevos requisitos en todo lo que tiene que ver con ecodiseño, con emisiones y con partículas. “Hemos trabajado intensamente el año pasado con muchos fabricantes, con muchos prototipos, con nuevas declaraciones de conformidad. Desde el punto de vista de los ensayos, hemos visto una mayor cantidad de equipos de leña frente a equipos de pellets, seguramente debido a la tensión en el mercado del precio del pellet.”

Jorge Herrero, nos puntualiza desde AVEBIOM, asociación que realiza un seguimiento anual de los precios de la biomasa, que estos precios resultan muy competitivos en comparación con otros combustibles fósiles. “Nosotros veníamos defendiendo durante muchos años la estabilidad de los precios. Llevábamos en torno a unos 15 años en los que el precio del pellet y de la astilla subía muy poquito, incluso menos que el IPC, incluso ha bajado de precio estos años. Pero en noviembre del año pasado, hemos visto que en los supermercados, en los bricocentros, estaba a casi el doble o más del doble que lo que podíamos comprar hace unos años. Ahora ya está bajando. La astilla no ha sufrido tanto porque no depende de producción energética para producirlo, pero también ha ido incrementando por costes de mano de obra, del transporte, del diésel. Ahora hay bastante producción. Lo más importante es que en Europa no ha habido una falta de suministro de biocombustibles. Se ha conseguido que todas las calderas y todas las estufas tengan biomasa. Sí que somos conscientes de que el invierno no ha sido muy fuerte y que todos hemos ido controlando los costes, intentando hacer menos horas de calefacción en nuestras casas, sea cual fuere el combustible que usemos.

Tendencias en investigación y desarrollo tecnológico

Las tendencias en desarrollo tecnológico en este sector pasan por intentar conseguir productos “más perfectos”, como nos explican desde Denia Stoves. “Esto significa básicamente dos cosas: que los rendimientos sean mayores y que las emisiones sean menores”. La norma europea de Ecodiseño se encuentra ahora en proceso una revisión para fomentar el diseño de aparatos que tengan un rendimiento lo más alto posible, con un aprovechamiento del combustible muy eficiente. O lo que es lo mismo, que el desperdicio, sea el mínimo posible, por una parte y por otra, que la emisión de partículas al ambiente sea la mínima posible, a pesar de que este tipo de aparatos de combustión resulten neutros en emisiones por la biomasa.

Desde AVEBIOM, confirman que el sector de la biomasa se encuentra centrado en mejorar la eficiencia energética de los equipos. “Hace 30 años conseguíamos unos rendimientos de un 70% en una caldera de biomasa, pero ahora podemos conseguir un 96% fácilmente. Las estufas o equipos domésticos, también son mucho más eficientes, mucho más controlados o incluso el diseño también es mejor. Los componentes cada vez son más eficaces y más respetuosos en cuanto a emisiones”.

Requisitos normativos actuales que deben cumplir los productos domésticos de biomasa

Si la evolución de estos aparatos pasa por su mayor eficiencia, ¿qué requisitos normativos deben cumplir actualmente las calderas y estufas de biomasa? Federico Muñoz, Director de CEIS, explica que existen tres requisitos fundamentales desde el punto de vista reglamentario a nivel europeo: “Hablaríamos primeramente del reglamento de productos de la construcción, que ha evaluado potencias y rendimientos en términos nominales. Recientemente hemos incorporado lo que tiene que ver con el diseño ecológico y el etiquetado energético. La normativa de Diseño ecológico entró en vigor en el año 2022. Tiene que ver con emisiones, con partículas y supuso una evolución desde el punto de vista del requisito. Ya no sólo estamos evaluando cómo de bien rinden los equipos, teniendo en cuenta cómo queman y por tanto, qué emisiones están emitiendo a la atmósfera. Y, por último, el aspecto normativo a cumplir se centraría en la incorporación de los requisitos de etiquetado energético.

Tal y como afirman desde CEIS, los cambios normativos lo que intentan es compaginar rendimientos con emisiones y partículas. “Teniendo en cuenta una característica de los productos más avanzados desde el punto de vista de la climatización, que es la estacionalidad, y no solo las potencias nominales, también las cargas parciales”.

A nivel europeo, no puede haber divergencia entre reglamentaciones nacionales y reglamentación europea. Pero sí es cierto que algunos países, como es el caso Alemania, Austria e Italia, introducen requisitos adicionales que permiten a los fabricantes tener ayudas y subvenciones de cara a la venta. Sin ser obligatorio, pero el mercado lo demanda.

“Para la pequeña y mediana empresa fabricante que quisiera introducirse en estos mercados internacionales supone una dificultad, dado que no tienen tanto conocimiento de esas reglamentaciones y porque están en las lenguas nacionales y en algunos casos, suponen dificultades”, explica Muñoz, director de CEIS, centro que asesora a los fabricantes en este tipo de normalizaciones.

Por otro lado, desde el punto de vista de la calidad del producto tradicional, la seguridad es lo primero, afirma Muñoz. A partir de ahí, hay que buscar un equilibrio entre rendimiento del equipo y emisiones. “Incrementar el rendimiento puede ir en contra de las emisiones porque quemamos “peor”. Hay que balancear y por tanto, el usuario tiene que fijarse en cómo de bien rinde el equipo pero sin perder de vista ese compromiso medioambiental que ofrece estatecnología”.

Gestión de la masa forestal en nuestro país ¿una cuenta pendiente?

La gestión forestal en nuestro país, una actividad clave para la obtención de la biomasa, es uno de los retos pendientes. Así lo afirman desde Apropellets. “La Administración tiene que empezar a concienciarse de que hay que hacer gestión forestal, de que no podemos estar abandonando masas forestales en el monte que se incendia en verano, verano. Ya el año pasado sufrimos una de las campañas de incendios más agresivas de la historia y estamos seguros de que va a seguir así. La carga de biomasa que soporta el monte cada vez es mayor y cada vez son masas más secas, con lo cual los incendios van a ser de mayor dimensión”. Por otra parte, la industria cada vez necesita más materia prima, más recursos. “Es algo inaudito que por una parte tenemos el almacén lleno, que puede ser un problema a nivel medioambiental porque puede dar lugar a una cantidad de incendios cada vez mayor y por otra parte, no se está abasteciendo a la industria que tiene una mayor demanda, con lo cual hay una unos deberes pendientes por parte de la administración muy importantes de empezar a pensar que la única salida para el monte es la gestión forestal”.

¿Cuál es el papel de la biomasa en el panorama general de las energías renovables?

El papel de la biomasa en el mix de las renovables y en los objetivos de descarbonización es clave. Desde AVEBIOM afirman que, hoy por hoy, la biomasa en Europa aporta más del 56% de toda la energía renovable; “si sumamos la eólica, la hidráulica, la fotovoltaica, la geotermia, no llegan a sumar todo lo que aporta la biomasa al mix energético en Europa”, asegura Herrero. “En España es un poco menos porque ya hay mucha potencia eléctrica instalada con eólica y solar. La biomasa representa en torno al 9% del mix energético nacional aportado y las expectativas a medio plazo al 2030 y a largo plazo al 2050 siguen siendo muy altas”. Una de los puntos fuertes de la biomasa es que una energía que podemos acumular. “Una persona, un consumidor, puede tratar de comprar biomasa y acumularla para un año con otras energías. Es un poco más difícil no tener esa seguridad del suministro. También las políticas de descarbonización de muchas empresas están haciendo que toda la cadena de proveedores esté muy interesada en la biomasa, porque con biomasa podemos garantizar producción de calor industrial, con tasas de emisiones de CO2 muy bajas”.

"En España estamos por encima de las 500.000 unidades ya funcionando operativas de biomasa que funcionan de forma automática, de pellets de astilla o de equipos que están utilizando otras biomasas de origen agroindustrial o agrario, como es el hueso de aceituna o las cáscaras, según los datos que tenemos de 2021", informa el representante de AVEBIOM. "Se vendieron casi unos 80.000 equipos nuevos en España el año pasado". 

Capacidad de producción de pellets en España

Precisamente la acumulación de stock de pellets por miedo a una escasez de este combustible fue una de las causas que llegaron a tensionar el mercado el año pasado. Algo que no llegó a ocurrir, tal y como nos afirmaban desde AVEBIOM. Sobre la capacidad de producción de pellets tenemos en España, preguntamos al representante de Apropellets, Roberto Bravo, quien nos afirmó que la producción este año ha sido de en torno a las 750.000 toneladas. “Es cierto que con esa tensión global que comentábamos sí que ha habido una mayor exportación. Solemos estar exportando en torno a las 100 o 130.000 toneladas. Este año puede haber sido cerca de las 200.000, pero verdaderamente se ajusta la producción a lo que es la demanda nacional”, para Bravo, se trata de un mercado “bastante cerrado”. “El mercado del pellet de nuestro país es claramente de autoconsumo. Producimos lo que consumimos. A pesar de que ha sido un año atípico con muchos factores que han distorsionado su normalidad, el pellet es un mercado continuista. Entendemos que ha sido un salto en el camino nada más y que estamos volviendo a la normalidad. El pellet es un recurso que depende de una gestión local y no depende de exportaciones o importaciones de terceros países, con lo cual es más fácil o más normal que podamos estabilizarlo a medio plazo”.

La parte doméstica está sufriendo más los vaivenes del precio de combustibles como el pellet, pero las instalaciones industriales, hay proyecto porque todo el mundo quiere tener una alternativa a otros combustibles tradicionales más convencionales y de origen fósil.