La Conferencia Internacional del Mercado del Pellet Doméstico (CIMEP) analiza la situación de la materia prima y las problemáticas del sector

Durante la CIMEP, se analizaron los factores más importantes para este mercado. Por una parte, la materia prima, a la que se dedicó un bloque con la presencia de los diferentes agentes: empresas forestales, administración y propietarios forestales. Y, por otra, las instalaciones que consumen el pellet, tanto en España como en Europa. Un tercer bloque se centró en la situación del mercado internacional, con presencia de países productores -Portugal, Canadá, Polonia o Rusia- así como de los grandes países consumidores -Francia e Italia-.

Para los profesionales del sector del pellet es importante conocer las tendencias, tanto en el mercado de pellets nacional como en el internacional, ya que marcan la pauta de sus previsiones de actividad. Sobre todo, las importaciones pronosticadas desde Portugal y otros países productores a España, así como las exportaciones previstas a Italia y Francia.

Producción del pellet, un mercado en crecimiento

Tal y como indicaron los diversos profesionales que participaron en la CIMEP, el mercado del pellet tiene todavía un amplio margen de crecimiento. La producción española se ha triplicado desde 2012 (pasando de 150.000 a 600.000 toneladas en 2018), respondiendo al progresivo incremento de la demanda generada por el aumento en las instalaciones de calderas y estufas de biomasa. 

La previsión de 2019 apunta a un incremento del 22%, hasta las 722.000 toneladas, por el aumento en la capacidad de producción en varias fábricas importantes y en la puesta en marcha de otras nuevas.

La extracción de la materia prima, con dificultades

La optimización del proceso de obtención de la materia prima, es uno de los grandes retos para la fabricación del pellet tal y como señalaron representantes de las madereras y propietarios forestales.
España es una potencia en biomasa pero con mucha zona montañosa de difícil acceso. 

Patricia Gómez, gerente de COSE (representante de propietarios forestales) señalaba que el 57% de la superficie española es forestal. “Somos el país que más está incrementando su superficie forestal con un crecimiento de 2,19 puntos, superior a la media europea”. Por lo tanto, la biomasa forestal se trata de un recurso con gran capacidad de explotación. 

“España es el 3º país europeo en recursos de biomasa forestal pero nos quedamos en 8ª posición en el ranking de obtención de biomasa para usos térmicos”, apuntaba Ana Herrero de Contradi.

El bajo aprovechamiento de los recursos naturales de biomasa provoca una excesiva acumulación de madera en el monte, lo que fomenta el riesgo de incendios.

Lograr un mayor apoyo de la Administración mediante la implantación de incentivos fiscales y la aplicación de políticas forestales que fomenten la limpieza y el aprovechamiento de nuestros montes fueron algunas de las propuestas más repetidas durante la conferencia. 

Problemáticas en el sector

El los dos últimos años se han producido dificultades en las subastas y, en ocasiones, escasez de materia prima, que encarece el precio del pellet y genera la sensación —que es errónea— de que el mercado está saturado.

Luz Pardo, Presidenta de Apropellets,  señalaba en su intervención cómo la tendencia española a la exportación del pellet (a Italia y Francia) está cambiando. El crecimiento de la instalación de estufas y calderas de pellets está provocando un cambio en la tendencia: “es previsible que en dos años el balance entre importaciones y exportaciones sea neutro”. 

Pardo, enumeraba también como principales problemáticas del sector del pellet: la dificultad en la extracción de la materia prima, una demanda de este producto muy estacional lo que obliga a almacenar un gran stock, una presión impositiva del 21%, la necesidad de una tecnología más eficiente en estufas y calderas y unos parámetros de calidad exigentes. 

Diego Lamelas, de Calor Erbi, por su parte, recalcaba cómo el sector del pellet es aún un sector “inmaduro” con “grandes retos”. Entre ellos la falta de grandes almacenes de pellet y la necesidad de recolocar la producción. “El 90% de la producción del pellet se realiza en la zona Norte de España, mientras que la mayor parte de la demanda no está ahí”. 

Por otra parte, los fabricantes e instaladores de calderas y estufas de pellet, pusieron el foco en la necesidad de contar con el pellet como un combustible de calidad, económico y fiable “con un suministro asegurado”. La calidad tanto del pellet (con el desarrollo del sello ENplus) como de las instalaciones realizadas y la necesidad de una buena información al consumidor sobre el uso y mantenimiento de los equipos, fueron otro de los puntos clave para los profesionales que participaron en la CIMEP.

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