Monitores de calidad del aire de Inbiot para entornos educativos más saludables y productivos

La pandemia ha puesto de relieve la calidad del aire interior en centros educativos y la importancia de una ventilación adecuada. Es por ello que cada vez son más las escuelas y universidades que buscan implementar medidas para su control y mejora.

Los beneficios van mucho más allá de controlar la COVID-19. Existe amplia evidencia de que garantizar una adecuada calidad del aire en edificios escolares puede reducir la transmisión de enfermedades infecciosas, al mismo tiempo que mejora el aprendizaje y aumenta el bienestar de alumnado, profesorado y personal. Las mejoras van desde un menor absentismo hasta puntuaciones más altas en pruebas y exámenes.

En este contexto, soluciones innovadoras como las de inBiot aportan información útil y actualizada sobre el estado de la calidad del aire para ayudar a mantener y mejorar de manera proactiva la salud y el bienestar en las aulas.

Sus dispositivos de monitorización MICA miden de forma continua los principales parámetros que condicionan la calidad del aire interior, como son la temperatura, humedad relativa, el dióxido de carbono, los compuestos orgánicos volátiles, las partículas en suspensión y el formaldehído.

Estos datos se almacenan y visualizan en la plataforma digital My inBiot, un dashboard sencillo e intuitivo para controlar y gestionar la calidad del aire de un vistazo, con acceso a alertas, análisis avanzados y recomendaciones en tiempo real. De esta manera es posible controlar su evolución y realizar acciones de mejora, como la optimización del sistema de ventilación y/o climatización que asegure la renovación de aire mínima.

Una solución con la que ya cuentan centros de referencia como la Universidad Politécnica de Madrid, que recientemente instaló 50 dispositivos MICA para controlar la calidad del aire en las aulas de su Escuela Técnica Superior de Arquitectura.

Gracias a la monitorización de la calidad del aire, el centro puede comprobar y adaptar las condiciones ambientales al bienestar de su alumnado y personal docente. Mantener una correcta ventilación, garantizando buenos niveles de CO₂ y calidad de aire, permite mitigar el contagio de enfermedades, reduciendo el absentismo y favoreciendo la salud y confort en las aulas.

Además de las afecciones de salud, diversos estudios han demostrado que respirar aire contaminado perjudica el rendimiento académico y la capacidad cognitiva del alumnado. Es por tanto de gran interés para los centros educativos asegurar las condiciones óptimas para el estudio, con una adecuada calidad del aire que impulse al máximo la productividad y concentración.

MICA, en la Universidad de Navarra

Otro ejemplo es la Universidad de Navarra, que también cuenta con dispositivos MICA para garantizar la calidad del aire de su Sede de Posgrado, fomentando un entorno de aprendizaje saludable y productivo.

Además, la solución de inBiot permite a las escuelas optimizar la ventilación y climatización en función de las necesidades reales de cada momento. Así, los centros pueden asegurar una ventilación controlada y eficaz para mantener una calidad del aire saludable sin derrochar energía.

Por todo ello, merece la pena invertir en medidas para el control y mejora de la calidad del aire de las aulas, además de compartirlas públicamente para la tranquilidad de estudiantes, familias y personal docente. En ese sentido, inBiot ofrece múltiples opciones para la visualización y comunicación de los datos que permiten a los centros educativos mostrar su compromiso con la salud, el bienestar y el rendimiento de su alumnado.

Si quieres más información sobre Inbiot, Soluciones Smart para la monitorización y mejora de la Calidad del Aire interior, haz clic en:

www.inbiot.es