Día Mundial de la Calidad del Aire: inBiot presenta las claves para una gestión efectiva de la calidad del aire interior

La calidad del aire interior no solo impacta en la salud de las personas, sino que también influye directamente en la productividad, la toma de decisiones y la rentabilidad de las empresas. Para ayudar a las organizaciones a abordar este reto, inBiot presenta cinco claves imprescindibles para una gestión efectiva de la calidad del aire interior.

1. Monitorización continua

La medición de la calidad del aire en interiores debe ser un proceso continuo, no un evento único. Al contrario de la medición puntual, que se realiza en un momento específico y puede no ser representativa de la calidad del aire en general, la monitorización continua permite detectar cambios en tiempo real y realizar medidas correctivas inmediatas. Al recopilar datos regularmente, la monitorización también permite detectar patrones y tendencias en la calidad del aire a lo largo del tiempo. Esto proporciona una mejor comprensión de los problemas de calidad del aire y, por lo tanto, puede guiar la toma de decisiones para su mejora. De la misma manera, medir de manera continua la calidad del aire interior también nos ayudará a realizar ajustes para optimizar nuestros sistemas de ventilación y climatización, lo que puede suponer importantes ahorros de energía y costes de mantenimiento.

2. Sensores avanzados

Los dispositivos de monitorización incluyen sensores que miden diferentes parámetros de la calidad del aire dentro de un espacio cerrado. La mayoría de soluciones del mercado se limitan a la medición de unos parámetros básicos, mientras que los dispositivos MICA de inBiot monitorizan una gran amplitud de parámetros y contaminantes interiores, lo que proporciona una comprensión más completa de la calidad del aire. Esto además permite una mayor caracterización de la calidad del aire y el cumplimiento de certificaciones privadas de edificios como WELL o RESET. Concretamente, MICA es capaz de recoger datos de hasta doce parámetros: temperatura, humedad relativa, CO2, compuestos orgánicos volátiles, NO2 , formaldehído, monóxido de carbono, ozono y partículas en suspensión PM1, PM2,5, PM4 y PM10. Por otro lado, conviene tener en cuenta que los monitores comerciales económicos y los de uso doméstico generalmente resultan menos precisos e informativos que los sensores comerciales de mayor calidad. Los dispositivos MICA están equipados con sensores europeos de última tecnología, con sistemas de autocalibración que garantizan una medición continua y precisa de la calidad del aire en interiores.

3. Conectividad y Dashboard de control digital

El Dashboard o plataforma digital de control es esencial para visualizar y analizar los datos de calidad del aire interior. El sistema IAQ debe incluir una plataforma que recoja los datos de los sensores en la nube y los convierta en información útil para los gestores. Nuestra plataforma digital, My inBiot, es fácil de usar y brinda información detallada y visual del estado y la evolución de la calidad del aire interior, permitiendo tomar decisiones informadas sobre cómo mejorar el aire y la eficiencia energética del edificio. Dispone de funcionalidades avanzadas como recomendaciones personalizadas, creación de alertas y generación de informes inteligentes, con una infraestructura cloud que provee del control y seguridad total de la información. Además, My inBiot permite generar y exportar informes de rendimiento en formatos aceptables para los estándares de construcción, facilitando la obtención de certificaciones como WELL y RESET Air. No todos los dispositivos IAQ pueden conectarse a un dashboard online, por lo que, a la hora de elegir, es importante asegurarse de que tenga conectividad a internet y que sea compatible con plataformas digitales. Los monitores MICA ofrecen diferentes opciones de conectividad a la nube para adaptarse a las necesidades de cada proyecto y edificio. Estos pueden conectarse mediante WiFi, NB-IoT, Sigfox o LoRaWAN, permitiendo el seguimiento y análisis de los datos en la plataforma My inBiot o en plataformas de terceros gracias a la integración con la API pública.

4. Integración con sistemas de HVAC

Para maximizar su eficacia, un sistema IAQ efectivo debe poder integrarse con los sistemas de gestión de edificios existentes. Esto permite que el sistema de control ajuste automáticamente los sistemas de climatización, ventilación y aire acondicionado (HVAC) según las necesidades reales de calidad del aire de cada momento. Esto no solo mejorará las condiciones interiores, sino que también reducirá el consumo de energía. Regular los sistemas HVAC en función de la calidad del aire puede conducir a una reducción de hasta un 21% en los costes de energía. A través de los protocolos de comunicación Modbus RTU (RS485) y Modbus TCP (inalámbrico), los dispositivos MICA pueden integrarse con sistemas BMS (Building Managment System) para la regulación de sistemas HVAC. De esta manera, se puede automatizar el funcionamiento de los equipos para alcanzar importantes ahorros energéticos garantizando en todo momento óptimos niveles de calidad del aire.

5. Transparencia y confianza

Una gran ventaja de la monitorización de la calidad del aire es que permite a las empresas asegurar a su personal, clientela y visitantes que están respirando aire limpio y que la empresa está cuidando su salud y bienestar. Por ello, es importante elegir un sistema IAQ que permita compartir fácilmente la información. La plataforma digital My inBiot ofrece múltiples opciones para mostrar públicamente los datos monitorizados en tiempo real, ya sea a través de pantallas, certificados o códigos QR. De esta manera, las empresas pueden mostrar su compromiso por ofrecer un espacio saludable, aumentando tanto la satisfacción de su plantilla como la reputación del negocio.

Invertir en calidad del aire interior implica tener en cuenta cinco aspectos clave para garantizar espacios más saludables, cómodos y productivos, a la vez que se optimiza la rentabilidad. En el Día Mundial de la Calidad del Aire, recordamos que un aire limpio no solo mejora nuestra salud y bienestar, sino que también contribuye a un impacto más sostenible. Con soluciones como las de inBiot, es posible avanzar hacia un futuro más responsable.

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