Consejos para usar de forma eficiente tu equipo de aire acondicionado

Reducir el consumo del aire acondicionado sin perder confort es la clave de un uso eficiente. Además de ahorrar en la factura eléctrica, siguiendo estas pautas estaremos limitando las emisiones de nuestro hogar. Tener en cuenta detalles como el grado de eficiencia del aparato, no enfriar demasiado una estancia y proteger del sol el equipo de aire acondicionado influyen favorablemente en el buen mantenimiento del aparato así como en su rendimiento energético. Si además, apoyas estos consejos con un buen aislamiento y una correcta ventilación, maximizarás la eficiencia energética del equipo y tu grado de confort en el hogar.

Presta atención al etiquetado energético

Elegir bien un equipo de aire acondicionado eficiente pasa por revisar su clasificación energética, porque de un aparato a otro puede haber diferencias de hasta un 60% del consumo. Incluye información relativa a su consumo anual de energía, la capacidad frigorífica y EER/COP (coeficientes de eficiencia energética en frío y calor). Además, establece dos medidas de eficiencia para modos frío y calor (cuando existan).

Fija la temperatura de refrigeración a 27º

La adaptación del cuerpo a las condiciones climáticas del verano y el hecho de llevar menos ropa y más ligera, hacen que una temperatura de 27º C sea más que suficiente, tal y como señalaba el  Plan de Contingencia con medidas de ahorro de energía que aprobó el Gobireno recientemente y que fija a qué temperatura debemos programar el aire acondicionado en verano para garantizar el ahorro energético. 

En cualquier caso, una diferencia con el exterior superior a 12º C no es saludable. Recuerda que cada grado que bajes el aire implica un importante aumento del gasto del 8%.  

No ajustes el termostato a una temperatura más baja de lo normal

No solo no conseguirás enfriar la casa más rápidamente, si no que estarás derrochando energía. Es más efectivo enfriar la casa de forma progresiva y mantener una temperatura de confort óptima.

Protege el equipo de aire acondicionado del sol

Es importante colocar los aparatos de refrigeración de tal modo que les dé el sol lo menos posible y que haya una buena circulación de aire en torno a ellos. En el caso de que las unidades condensadoras estén en un tejado, es conveniente cubrirlas con un sistema de sombra o elementos de protección solar.

Mejora el aislamiento y el control solar de la vivienda

Instalar toldos, persianas, mallorquinas, etc en las ventanas donde más da el sol, evitar la entrada de aire caliente en el interior de la vivienda y aislar térmicamente fachadas, muros y techos nos ayudará a conseguir ahorros de energía superiores al 30%. 

Elige colores claros en techos y paredes exteriores

Reflejan la radiación solar y, por tanto, evitan el calentamiento de los espacios interiores.

Ventila adecuadamente

Si no dispones de un sistema de ventilación mecánica que garantice la renovación del aire interior sin pérdidas térmicas,  aprovecha las horas más frescas del día durante el verano para ventilar la casa. A primera hora de la mañana y por la noche son los momentos más adecuados.

Busca asesoramiento

Por último pero no menos importante, déjate aconsejar por un instalador profesional de aire acondicionado. Además de conocer con detalle las características de los equipos, te ayudará a tomar decisiones clave en función de la zona climática en donde se ubique tu vivienda, la orientación de las estancias o el grado de aislamiento del inmueble. En definitiva, será el instalador profesional el que pueda calcular qué sistema de climatización será el más adecuado para tu hogar. 

Te recomendamos la instalación de equipos de aire acondicionado de fabricantes que aseguren la calidad y un buen servicio de mantenimiento, seguros y fiables, que ofrecen soluciones eficientes de climatización en viviendas y locales, sin dejar de lado el ahorro energético y el respeto al medio ambiente.