Recientemente, C N I inició un debate en el seno de la Asociación Europea de Aire Acondicionado y Refrigeración a la cual pertenece, AREA, con el fin de trabajar en un posicionamiento conjunto para salir al paso de las recientes publicaciones e investigaciones respecto al papel del aire acondicionado en la transmisión del virus COVID-19. Tras unas semanas de trabajo conjunto de las 25 Asociaciones Nacionales de 21 países, entre las que se haya C N I, AREA ha publicado un boletín técnico en el que confirma que no existe una investigación sólida que respalde que el COVID-19 se pueda transmitir a través del aire acondicionado.
Tras esta iniciativa de C N I, AREA ha redactado este boletín técnico que ha sido traducido a varios idiomas y comienza confirmando que siempre que sea posible hay que evitar la recirculación del aire en los sistemas y cambiar a aire fresco, aunque ello implique una reducción en la eficiencia energética. “Esto en España va a ser difícil de llevar a cabo en muchas zonas por las altas temperaturas, donde es muy complicado para una renovación de aire de aproximadamente un 10/15%, enfriar aire exterior de 35ºC hasta 25ºC”, matiza José Luis Uribe, miembro del Comité Técnico de CNI.