El mercado fotovoltaico en España: lidera el mercado europeo fotovoltaico, con más de 4,7 nuevos GW de capacidad instalada en 2019

Por Comunidades Autónomas, Castilla-La Mancha y Andalucía siguen siendo los principales focos de desarrollo de la tecnología fotovoltaica. La primera, con más de 11.600 instalaciones en funcionamiento suma ya una potencia total acumulada de 1.777 MW, mientras que Andalucía cuenta con algo más de 8.000 instalaciones en funcionamiento y acumula un total de 1.723 MW. Con capacidades instaladas también importantes les siguen Extremadura, Murcia, Aragón y Castilla y León.

Impactos positivos y previsiones inciertas

Según se desprende del Informe Anual elaborado por UNEF, el crecimiento del sector fotovoltaico en España ha impactado positivamente tanto a nivel económico -lo que ha supuesto, por ejemplo, una contribución directa al PIB nacional de 3.220 millones euros-, como social -con un 30% más de puestos de trabajo generados, que suman un total 58.699 empleos entre directos, indirectos e inducidos-.

Para 2020 las perspectivas son menos halagüeñas, aunque Donoso reconoce que “hacer una previsión para finales de año en estos momentos resulta muy complicado y cualquier dato habría que cogerlo con pinzas”. En los seis primeros meses del año ya se habían conectado 780 nuevos MW; sin embargo, la irrupción de la crisis sanitaria ha provocado retrasos en la construcción de los proyectos pendientes.

Si antes de la pandemia, las previsiones eran de continuidad con estimaciones en el orden de los 2 GW para plantas en suelo y de 600 MW para autoconsumo, la situación actual, unida a la ausencia de una referencia de capacidad subastada como en 2019, hace incierta la nueva capacidad que se conectará en 2020, “aunque podría estar en el entorno de 1.500 nuevos MW a final de año”, afirmó Donoso. En el caso concreto del autoconsumo, “la caída más significativa se ha producido en las pymes y el sector servicios, mientras que el crecimiento más destacado se está produciendo en el sector doméstico”, añade el Director General de UNEF.

Propuestas para reactivar el sector

Con el objetivo de mitigar el impacto negativo provocado por el Covid-19 en el sector, UNEF ha planteado a la Administración una serie de medidas para acelerar el desarrollo de plantas en suelo y fomentar el despliegue del autoconsumo. Respecto al autoconsumo, la patronal solicita, entre otras cuestiones, la eliminación del requisito de licencia de obras, que se sustituiría por una comunicación previa, lo que supondría una agilización de la tramitación administrativa a nivel autonómico; la reducción del término fijo de la factura para que la tarifa sea un incentivador de la eficiencia energética, el autoconsumo y la carga del vehículo eléctrico; la adopción de medidas fiscales temporales de un año de vigencia; así como la revisión de la Ley de Propiedad Horizontal.

Respecto a las plantas en suelo, la asociación pide la convocatoria urgente de nuevas subastas de renovables para aportar certidumbre a los desarrolladores renovables y fortalecer el sector industrial; que se apruebe la reforma de la normativa de Acceso y Conexión para frenar la especulación y aportar transparencia al proceso; y que se reduzcan los plazos de tramitación.

Calendario de subastas 

En el caso de las subastas de renovables, UNEF propone que haya un calendario de subastas a cinco años con dos convocatorias anuales, que sean tecnológicamente neutras bajo un modelo pay-as-bid que marque un precio por la energía generada, dando prioridad a los proyectos más maduros. Asimismo solicita que los avales requeridos sean de 30 €/kW, que una parte del proyecto (inferior al 25%) vaya a mercado, que se limite la capacidad obtenida en una subasta a un máximo del 30% por agente y que haya una reserva del 20% para proyectos más pequeños, de hasta 10 MW.

Precisamente, el Congreso de los Diputados convalidó en el día de ayer el decreto ley aprobado por el Gobierno el pasado mes de junio para poner fin a la especulación en el acceso al sistema eléctrico con instalaciones de energía renovable con el control de estos permisos, una moratoria en la concesión de los mismos y un nuevo sistema de subastas basado en el precio de la energía.

A nivel regulatorio, Donoso destacó el lanzamiento, en diciembre de 2019, del Pacto Verde Europeo (European Green Deal), que nace de la necesidad de reforzar por parte de la Comisión su compromiso en abordar los desafíos relacionados con el clima y el medio ambiente y que reconoce la oportunidad que supone la transición energética para fortalecer el sector industrial y crear empleo. Precisamente, uno de los elementos fundacionales de este Pacto es la Ley del Clima europea, en la que se establecerá el objetivo de neutralidad climática para 2050.

A nivel nacional, 2019 destacó por la publicación del borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) que, en su versión revisada en los primeros meses de 2020, aumenta hasta 39 GW el objetivo de potencia fotovoltaica instalada en 2030; la fijación de la tasa de rentabilidad razonable de las energías renovables para el periodo regulatorio 2020-25 a través del RD-Ley 17/2019; y la aprobación del RD 244/2019 de autoconsumo.