Declaración de emergencia climática en España ¿Qué medidas implica?

• Elevar a las Cortes Generales el proyecto de ley de Cambio Climático y Transición Energética. Con esta medida se pretende alcanzar emisiones netas cero en 2050, un sistema eléctrica 100% renovable o un parque de vehículos ligeros con emisiones nulas de CO₂.
• Presentar la Estrategia a largo plazo 2050 para la reducción de emisiones, donde se define una senda de descarbonización a largo plazo de nuestro país, que garantice la neutralidad climática a 2050.
• Presentar el segundo Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático. Este plan incluye el sistema nacional de observación del clima y la elaboración de un menú de indicadores de impacto, cuyo objetivo es conseguir un país menos vulnerable frente a los impactos del cambio climático.
• Reforzar los mecanismos de participación de la ciudadanía ya existentes mediante la creación de una Asamblea Ciudadana del Cambio Climático, que contará con composición paritaria de entre  mujeres y hombres.
• Impulsar la transformación de nuestro modelo industrial y del sector servicios a través de Convenios de Transición Justa y de medidas de acompañamiento.

La declaración de emergencia climática recuerda que la región mediterránea, donde se incluye a España, será una de las zonas más afectadas por el cambio climático y que sufrirá impactos importantes en muchos sectores de actividad económica así como en gran parte de nuestros ecosistemas acelerando el deterioro de recursos esenciales para nuestro bienestar como el agua y el suelo fértil, y amenazando la calidad de vida y la salud de las personas. Este impacto del cambio climático más intensificado en la zona mediterránea es ya evidente en la actualidad, pues el incremento medio de la temperatura global sobre niveles pre industriales es de 1,1 ºC mientras que en la zona mediterránea ya se sitúa en 1,5 ºC.

La región mediterránea, donde se incluye a España, será una de las zonas más afectadas por el cambio climático y que sufrirá impactos importantes en muchos sectores de actividad económica.

Incremento de las necesidades de refrigeración y climatización

Precisamente, uno de los impactos a recoger en el segundo Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático será el incremento de las necesidades de refrigeración, que supondrá una mayor demanda energética como consecuencia de este incremento de la temperatura. Así conforme a un estudio realizado por EPEE (European Partneship for Energy and the Environment) el número de aparatos de refrigeración y climatización se podría incrementar de manera sustancial en 2030 como consecuencia del cambio climático y de otras variables, como un mayor crecimiento económico y un aumento del nivel de vida. Otro de los factores a tener en cuenta, es el proceso de electrificación de los consumos finales de energía, que incrementará el uso de bombas de calor para cubrir las necesidades de calefacción y agua caliente sanitaria.

Para afrontar esta situación de emergencia climática, por tanto, es necesario conseguir una refrigeración y climatización más sostenible a través del uso de refrigerantes de bajo o nulo potencial de calentamiento atmosférico y con mayor eficiencia energética. Esto, además, ayudará a conseguir muchos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.