Bosch Home Comfort destaca la importancia de la rehabilitación para mejorar la eficiencia energética de las viviendas

Teniendo en cuenta que, actualmente, se estima que en la Unión Europea los edificios consumen el 40% de la energía y que sólo en España, las viviendas son la tercera fuente de emisiones de CO2, la marca considera crucial mejorar la eficiencia energética de las viviendas para reducir este consumo. Por ello, propone evaluar y mejorar diferentes aspectos que puedan afectar a la eficiencia de los edificios, como el aislamiento, las ventanas, la zonificación o la utilización de equipos eficientes y la incorporación de energías renovables.

En este sentido, desde el año 2013 es obligatorio contar con la etiqueta del edificio y de las viviendas. En esta etiqueta se refleja el consumo de la energía y las condiciones de ocupación y utilización, en base a ello se le asigna una letra, de la A a la G, siendo la A la más eficiente y la G la menos eficiente. Cualquier certificado de eficiencia energética, caduca a los 10 años de su emisión o bien a los 5 años en el caso de una calificación G y es obligatorio adjuntarlo en la documentación de venta o alquiler de una vivienda.

Son varios los factores que influyen en la obtención de la etiqueta energética de una vivienda y Bosch Home Comfort recuerda cuales son esos elementos que la determinan:  

1. La zona climática. La ubicación geográfica de la vivienda, incluyendo su altitud y sus condiciones climáticas locales, es un factor determinante.

2. La superficie de la vivienda también es un factor importante que considerar. La dimensión del inmueble también juega un papel importante Si nos encontramos ante dos viviendas cuyas instalaciones y calidad de la envolvente son similares, pueden obtener calificaciones diferentes si tienen tamaños distintos. Es decir, una vivienda más pequeña puede tener una calificación energética más alta que una vivienda más grande, incluso si sus características son similares.

3. Estado de la envolvente. Este elemento comprende todos los espacios interiores habitables de una vivienda y los separa del exterior. La evaluación de la envolvente implica analizar tanto las partes ciegas (espesor o los materiales) como los huecos (ventanas y puertas), ya que influyen en el rendimiento energético de la vivienda.

4. Instalación de climatización eficiente. La elección de sistemas de climatización de alta eficiencia energética, como calderas de condensación, bombas de calor y sistemas de ventilación, también influyen en la calificación energética de la vivienda.

Consciente de que el 84,5% de los edificios en España tiene etiquetas E, F o G que responden a una baja eficiencia energética, y muestran la radiografía de un parque inmobiliario antiguo e ineficiente que tiene la necesidad de ser reformado y que a su vez es esencial para el proceso de descarbonización en Europa, es necesario que se adopten medidas de eficiencia energética, reducción de emisiones e implementación de sistemas eficientes. Este enfoque no solo impulsa el cumplimiento de objetivos climáticos, sino que también revitalizaría el mercado.

La compañía apuesta por el crecimiento de la rehabilitación de los edificios en los próximos años impulsado también por las ayudas por parte de la Administración, generando una reposición significativa de sistemas de calefacción ineficientes. Asimismo, aquellas rehabilitaciones que apuesten por incorporar energías renovables, pero presenten dificultades por cuestiones de espacio o inversión, pueden encontrar como solución la hibridación mediante caldera y bomba de calor.

En definitiva, Bosch Home Comfort se posiciona como un aliado en la búsqueda de un hogar más eficiente.

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