Javier Cueto, Presidente de la Confederación Nacional de Instaladores y Mantenedores CNI

¿Con qué salud diría que se encuentra el sector de las instalaciones?

Ha dado un cambio importante si lo comparamos con lo que era hace unos años.  Entonces había trabajo para todos y apenas había tiempo para buscar nuevas oportunidades de negocio. El radical descenso de la obra nueva y de la contratación pública, ha significado para muchas empresas la necesidad de reestructurarse y buscar nuevas oportunidades de negocio.

Sin duda tenemos muchas empresas “enfermas” o “convalecientes”, pero otras están aprovechando las oportunidades que han surgido con la eficiencia energética y las energías renovables para empezar a abrirse nuevos caminos. Aún es pronto para dar cifras ni porcentajes de cómo ha afectado la crisis a nuestro sector.

¿Hacia dónde se orientan las oportunidades de negocio para los instaladores hoy en día? ¿Hay salidas al final del túnel de la crisis?

Siempre hay salida si pensamos que la hay, pero no debemos obcecarnos en buscarla. La salida se abrirá sóla mientras trabajamos en nuevas áreas de negocio y nos esforzamos por conocer a fondo nuevas técnicas y  todo lo relativo a las energías renovables y eficiencia energética, que es donde sin duda estará el negocio de los instaladores en un futuro próximo.

La rehabilitación será el gran caballo de batalla que tendremos que sacar adelante para coger el relevo de lo que en su día representó la nueva construcción. CNI participa activamente con el Gobierno en tareas de asesoramiento informando sobre las necesidades reales de nuestro sector que nos transmiten nuestras delegaciones provinciales.

Sobre la modificación de la ley que elimina los carnés profesionales, ¿de qué forma afecta esta ley a los instaladores y a los consumidores?

A quien afecta más sin duda es a los consumidores. Antes con el carné profesional, bastaba mostrarlo para certificar que el instalador había cumplimentado los requisitos legales necesarios para poder realizar determinados trabajos de instalación. Ahora ese documento ha desaparecido, con lo cual el consumidor no tiene forma de comprobar que ese instalador dispone de todos los requisitos legales. En teoría el Ministerio debía poner en marcha un Registro Integrado Único donde se registren todos los instaladores que hayan realizado la formación preceptiva, pero hasta la fecha no ha visto la luz.  A nosotros lo que nos preocupa sobre todo es la seguridad de las instalaciones, y la eliminación de los carnés es muy positivo eliminando barreras innecesarias, siempre y cuando la administración disponga de los medios necesarios para realizar inspecciones aleatorias, pero esto por desgracia no ocurre.

¿Están satisfechos con la nueva ley de morosidad? ¿Qué cambios positivos (o no) ha traído al sector?

Hemos conseguido lo más difícil, algo que para muchos parecía imposible. Ahora tenemos que seguir luchando porque la ley sea cumplida por todos. El cambio más positivo es el cambio de mentalidad que se está produciendo de forma generalizada. Lo que todavía nos queda por conseguir es que empresas que se financian a costa dilatar el pago de las facturas de sus proveedores, empiecen a pensar que hay otra forma de hacer negocios.

Tienen un acuerdo con Cefoim para garantizar la formación de sus asociados ¿cómo funciona y en qué consiste este acuerdo?

CEFOIM es un centro de formación de instaladores que busca permanentemente la innovación y el cambio, y para ello invierte de forma constante en la mejora de todos sus equipos e instalaciones.  Desde CNI difundimos los cursos de formación de CEFOIM, y en especial aquellos a distancia que pueden cursarse desde cualquier parte. Además de esta formación técnica básica del instalador, para CNI también es de suma importancia la formación en otros aspectos más avanzados, como la eficiencia energética, las auditorías energéticas, las energías renovables, las empresas de servicios energéticos, las casas pasivas o la rehabilitación por ejemplo. Intentamos trasladar a nuestros asociados la información más completa y actualizada en todos estos aspectos, para ello establecemos acuerdos de colaboración con empresas de formación e instituciones académicas para desarrollar cursos específicos para instaladores. Ahora mismo estamos colaborando muy estrechamente con STRUCTURALIA en el curso de experto en gestión energética que va por su 2ª edición y ha resultado un gran éxito, o el curso superior de Gestión y Mantenimiento de Instalaciones para Técnicos.

¿Cuáles son los próximos proyectos de CNI a corto y medio plazo?

Estamos trabajando intensamente por el desarrollo de la rehabilitación. El mayor problema que tenemos ahora es la total y absoluta falta de legislación adaptada a la rehabilitación. El sector de la edificación actualmente, está basado en parámetros tecnológicos, legales, normativos, empresariales y financieros que son propios de la nueva construcción. Este hecho dificulta que la regeneración urbana y la rehabilitación puedan alcanzar el papel que les corresponde en el futuro.

Para conseguir un sector especializado, formado, innovador, estructurado y adaptado a las necesidades actuales, tenemos que estar todos, no sólo promotores que sin duda juegan un papel preponderante, sino también ingenieros, instaladores y como no, consumidores, el ciudadano, en el que apenas pensamos y a quien van dirigidas todas estas acciones. Éstos son dos de los aspectos en los que estamos trabajando, necesitamos una visión integrada de la rehabilitación en la que todos los profesionales aportemos nuestra experiencia, y luego tenemos que acercarnos mucho más al consumidor, al ciudadano e informarle a él también.