Cómo ahorrar hasta un 25% en calefacción y agua caliente en instalaciones térmicas comunitarias

El evento contó con la presencia e intervención de José Luis Gutierrez, Director Comercial para Industria de Viessmann, que señaló el esfuerzo que está haciendo la compañía por adaptarse a todo lo que supone el reto de la descarbonización, reduciendo las emisiones de CO2 en todo el mundo y poniendo su granito de arena para conseguir que los espacios sean habitables; Pedro Vila-Belda Martí, Director Gerente de la Fundación de la Energía, que señaló la gran labor que queda por hacer a la hora de informar a los ciudadanos, administradores de fincas e instaladores en lo referente a repartidores de consumo; y Salvador Díez Lloris, Presidente del Consejo General de Colegios de Administradores de Fincas de España, que habló de la importancia del trabajo de las empresas para mejorar el rendimiento de las instalaciones.

Salas de calderas renovadas y más eficientes

Una de las intervenciones más destacadas fue la de Eduardo Elejabeitia, Responsable de Producto de Caldera de Pequeña y Mediana Potencia en Viessmann, que centró su charla en hablar de la importancia que tiene para los propietarios de viviendas renovar las salas de calderas de sus edificios. El representante de Viessmann señaló que uno de los temas más conflictivos que se suelen dar en las comunidades de propietarios está relacionado con la calefacción central debido, entre otras cuestiones, “a la disparidad de sensibilidades de los propios vecinos”. 

Esto suele ser así, explicó Elejabeitia, porque muchas de las salas de calderas que existen en estos edificios suelen ser “instalaciones obsoletas” que derrochan mucha energía, con generadores, bombas y sistemas poco eficientes, cuyos criterios energéticos están calculados desde hace muchos años y no coinciden con los actuales, lo que supone “un coste de mantenimiento excesivo” y, además, “no consiguen aportar el mismo grado de confort a todos los vecinos”, de ahí que muchos piensen que la solución está en la individualización del servicio, “algo que en la mayoría de los casos no es posible ni técnica ni económicamente”. 

Eduardo Elejabeitia apuntó que los generadores de calor obsoletos “emiten gran cantidad de gases de efecto invernadero perjudiciales para la salud, siendo una parte importante de la contaminación de las grandes ciudades”. Afortunadamente, tal y como comentó el representante de Viessmann, muchas comunidades de propietarios han ido realizando con el paso del tiempo importantes mejoras en sus viviendas, tanto en aislamiento exterior, interior y de suelos, como en cerramientos y cambios de emisores, que ha supuesto importantes ahorros al reducirse el consumo de energía. 

Reformar una sala de calderas, afirmó Elejabeitia, supone importantes ventajas. Por un lado, se consigue adaptar la producción de calor a las mejoras realizadas en las viviendas, a la vez que aumenta el confort al conseguir un ajuste de la temperatura a las necesidades reales. Asimismo, facilita la implantación de sistemas de medición individualizada y la instalación de sistemas de control individual, lo que supone un ahorro considerable en combustible que, según el grado de reforma, puede llegar hasta el 35%, con una amortización de la inversión que puede llegar a ser de cinco años. Además, la modernización de las salas de calderas reduce los costes de mantenimiento, posibilita la telegestión y supone un beneficio para el medio ambiente al reducir hasta un 25% las emisiones contaminantes. 

Contabilización de consumos individuales: el futuro

Ignacio Abati, Director General de ista, recordó a los asistentes que se avecinan “grandes cambios a nivel legislativo” que afectarán a más de 1,5 millones de viviendas en toda España a partir del momento en que se apruebe la normativa que regulará la contabilización de consumos individuales en instalaciones térmicas de edificios. Actualmente, la compañía ya ha instalado más de un millón de dispositivos en nuestro país, que actualmente dan servicio a más de 500.000 viviendas, de los que el 60% son de lectura remota. 

Por un lado, explicó Abati, “vamos a tener que instalar ocho millones de repartidores de costes de calefacción y válvulas en aquellos edificios que aun funcionen con calefacción central”. Con esta medida, señaló el representante de ista, “se pretende que los consumidores paguen por lo que realmente consumen en calefacción”. La instalación de repartidores de calefacción, según distintos estudios, supone un 25% de ahorro por edificio. De esta manera, afirmó, “no solo se obtendrá un mayor ahorro económico, estimado en más de 200 euros al año de media por familia, sino que además se podría evitar la emisión anual de un millón de toneladas de CO2 a la atmósfera”. Sin embargo, advirtió, esto solo se puede hacer, “con mucha preparación y confiando en empresas e instaladores que garanticen un servicio de calidad”. Empresas de la talla de ista, afirmó Abati, “llevan varios años preparándose para realizar estos cambios, con importantes inversiones en la fabricación de este tipo de dispositivos”. 

"Todos los contadores de agua y calefacción que se instalen a partir de 2020 deberán ser de lectura remota, de manera que a partir de 2027 se ponga fin a los contadores de lectura presencial".

Otro de los aspectos que será de obligado cumplimiento con la nueva normativa es que todos los contadores de agua y calefacción que se instalen a partir de 2020 deberán ser de lectura remota, de manera que a partir de 2027 se ponga fin a los contadores de lectura presencial. De esta manera, el propietario recibirá mucha más información sobre sus consumos, de forma gratuita y por internet. Esto supondrá una gran ventaja para el propietario, apuntó Abati, ya que le permitirá “tener acceso a más información y tomar decisiones en cuanto a su consumo, que le permitirán ahorrar”. Mientras haya lectura presencial, los vecinos recibirán todos sus recibos de ACS y calefacción cada dos meses, que empezarán a ser mensuales cuando la lectura sea remota. Los nuevos recibos, que serán electrónicos, serán parecidos a los de la luz, e incluirán un histórico de consumos, información de combustible y CO2, así como una comparativa de precios. 

El Director General de ista enumeró las cinco claves que, a juicio de la compañía, deberían estar en las mentes de todos “para elegir bien y cumplir con la normativa”. En primer lugar, mencionó el hecho de que el servicio de reparto de costes sea cualificado, de manera que quien realice el servicio deberá acreditar experiencia y estar certificado por Aenor en reparto de costes para calefacción. Otro de los puntos clave es que exista una oficina virtual que facilite el trabajo a los administradores e informe a los usuarios finales sobre sus consumos.

En tercer lugar, ista hizo hincapié en que los productos que se instalen sean de calidad, “no se debe confiar en productos fabricados en países de fuera de la UE que no están autorizados para su instalación dentro de la UE” y, sobre todo, que estén bien instalados. Asimismo, resaltó la necesidad de que la instalación central de calefacción funcione adecuadamente, de forma eficiente y sin ruidos, lo que supondrá una mejora en el confort de los vecinos. Por último, señaló como otro punto clave la medición (que no estimación) en las salas de calderas de los consumos totales de ACS y calefacción en circuitos primarios y secundarios.
 

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