Los ayuntamientos como primeros actores del progreso de la eficiencia energética

 

En la jornada quedó de manifiesto que los ayuntamientos deben ser los primeros actores en el progreso de la eficiencia energética tal y como propone el acuerdo de Europa sobre la Unión Energética.

 

Para Javier García Breva, Presidente de N2E, la mayor urgencia es crear demanda de proyectos de eficiencia energética e instrumentos financieros que respalden las inversiones y los ayuntamientos se configuran, a través del Pacto de Alcaldes, como su principal motor debido al excelente resultado de las inversiones en ahorro de energía en la economía local y en nuevos empleos. “Las experiencias de estos tres municipios en concreto avalan que es posible el cambio hacia un modelo energético descentralizado. El liderazgo municipal en materia energética requiere el convencimiento desde la cabeza de las instituciones y de un gran consenso político y social para construir la necesaria colaboración público-privada”, comentó el experto.

 

En cuanto a la financiación, Javier García Breva apuntó que “el 22% de todos los fondos europeos que se destinan a España para los próximos siete años se han de dedicar a objetivos de adaptación al cambio climático y a alcanzar el objetivo de ahorro del 20% de energía primaria en 2020. La ineficiencia de nuestro parque de edificios y de nuestro transporte es superior, incluso, a la de Europa, por lo que hay un enorme mercado de rehabilitación y de movilidad sostenible”.

 

 

Ángel Ruiz, Coordinador de Planificación Económica y Ciudad del Ayuntamiento de esta localidad barcelonesa de 70.000 habitantes, fue el encargado de relatar en primera persona la experiencia llevada a cabo en Rubí, un magnífico ejemplo de proyecto integral de eficiencia energética en la ciudad más industrializada de Cataluña, donde las actuaciones del ayuntamiento no sólo han impedido la deslocalización industrial sino que han creado empleo, convirtiendo a la ciudad de rubí en un referente nacional e internacional en eficiencia energética y uso de renovables en entornos industriales, comerciales y domésticos. 

 

Ruiz también apuntó que “No es sostenible que España importe el 80% de la energía”, por lo que estas políticas de ahorro y sostenibilidad energéticas son totalmente necesarias, animando al resto de corporaciones municipales a llevar a cabo un “mayor activismo” en este sentido. 

 

Desde el ayuntamiento de Rubí se lleva a cabo una importante labor educativa en los colegios que les ha permitido reducir un 70% el consumo de luz y un 58% el del gas en los centros. Asimismo, todos los edificios municipales cuentan con certificación energética y también se han puesto en marcha dos fotolineras fotovoltaicas para recarga de vehículos eléctricos.

 

 

Para esta localidad valenciana de 30.000 habitantes era necesario un cambio en materias de ahorro energético. Desde 2010 viene desarrollando un proyecto en este sentido con el objetivo principal de reducir las emisiones de CO2 a través de la movilidad sostenible y la protección de zonas verdes, consiguiendo ahorrar un millón de euros en energía a los presupuestos municipales. 

 

Lluna Arias, Concejala de Medio Ambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Burjassot comentó a la audiencia reunida en la la jornada de Buenas prácticas y Oportunidades en Eficiencia Energética varias de las medidas adoptadas para lograr este fin, como son el “fomento del uso de bicicletas públicas o la recuperación de la huerta” mediante el proyecto “El Pulmón Verde”.

 

 

El director de la Agencia de la Energía de Málaga, Jaime Briales, fue el encargado de cerrar la jornada con la descripción de las medidas que han venido llevando a cabo en los últimos años, como el Plan de Acción para la Energía Sostenible en 2011. Para Briales, “se trata de aplicar políticas a largo plazo en combinación con apuestas concretas como puede ser el fomento de la utilización de vehículos eléctricos”.

 

El proyecto llevado a cabo en la ciudad andaluza es un plan integral de eficiencia energética basado en la captación de fondos europeos y de terceros países para proyectos de eficiencia energética en edificios y vehículos eléctricos, vinculados a la introducción de las tecnologías de la información y a su proyecto de ciudad cultural.

 

La eficiencia energética es la mejor protección a los consumidores

 

En definitiva, según palabras de Javier García Breva, presidente de N2E, “la eficiencia energética es la mejor protección a los consumidores a través del acceso a los servicios energéticos, al autoconsumo, los contadores y las redes inteligentes. La autonomía municipal y las competencias de los Ayuntamientos pueden determinar el uso racional de la energía en las ciudades”.