Sistema de climatización por paredes y techo radiante

Miércoles, 11 Junio 2014
Escrito por Idoia Arnabat CALORYFRIO

La climatización por paredes radiantes es un sistema de climatización que utiliza las superficies de las paredes y/o el techo que nos rodean para intercambiar el frio o el calor mediante la radiación. El principio físico sobre el que basa su eficacia es el mismo que el del suelo radiante.

¿Y cómo baja el calor, si todo el mundo sabe que el calor "sube"?

El concepto "el calor sube" lo tenemos interiorizado porque siempre estamos rodeados de aire y es éste el que realmente sube cuando lo calentamos.

El calor se define como la forma de energía que se transfiere espontáneamente entre diferentes cuerpos o diferentes zonas de un mismo cuerpo que se encuentran a distintas temperaturas.

Las superficies radiantes realizan ese intercambio de energía, independientemente de la posición que ocupen. Normalmente solemos poner el ejemplo del sol. La estrella irradia calor en todas direcciones. Si el calor solamente se desplazase en sentido vertical, ¿nos podríamos acercar totalmente a una gran hoguera, simplemente teniendo cuidado de no colocarnos en su vertical?

¿Qué ventajas nos plantea el sistema de superficies radiantes en techos y paredes?

Escasa inercia térmica o rapidez para entrar en funcionamiento o dejar de hacerlo. La transferencia térmica se realiza rápidamente por escasa distancia de la superficie radiante con el "circuito de agua"

Elevado Rendimiento. Gracias a que los circuitos que transportan el "agua" (el líquido del circuito es en su mayor parte agua) son muy delgados, de entre 6 y 10 mm, el caudal a mover es mínimo. La cantidad de energía necesaria para calentarlo o enfriarlo también lo será.

Recomendable por el confort obtenido. En su funcionamiento se tienen en cuenta factores como la humedad y la temperatura del aire, permitiendo regular su aportación de frio o calor en base a la sensación térmica. Ésta es quien realmente determina si tenemos frio o calor. En los sistemas tradicionales solamente se controlaba la temperatura del aire.

Fácil instalación en obras de rehabilitación o reestructuración de inmuebles antiguos,en los que no se puede modificar el suelo.

Recomendable estéticamente. El interiorismo no es rehén de piezas externas como radiadores, o fancoils por su total integración en el techo o paredes.

¿Qué inconvenientes nos platea?

El principal inconveniente que se plantea es el económico, aunque conviene matizar:

En uso residencial, por el momento, no está al alcance de todos los públicos.

En edificios de uso terciario, es diferente. La inversión es estudiada teniendo en cuenta el coste del consumo necesario para la climatización en los períodos sucesivos. Convirtiéndola en una opción muy atractiva.

Instalación y mantenimiento realizados por personal cualificado. (Pocos profesionales con experiencia en estos sistemas) En refrescamiento la instalación requiere de más atención, si cabe, ya que el factor humedad debe estar perfectamente controlado, para evitar problemas de condensación.

Lo novedoso del sistema también crea cierto escepticismo hacia él. Un sistema del que no se tienen referencias cercanas y no se ha podido contrastar personalmente su funcionamiento, provoca incertidumbre a la hora de prescribirlo por el miedo a equivocarse. Es lógico, no es lo mismo estar de acuerdo ante la teoría, por muy demostrada que esté en un catálogo, que "jugarse" el prestigio por un sistema novedoso.

Modificado por última vez enMiércoles, 14 Diciembre 2022 14:53

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