La eficiencia energética como oportunidad empresarial

 Desde la Unión Europea se busca una mayor competitividad y sostenibilidad a través de lo que se denomina ecologización de las pymes. La iniciativa empresarial ecológica para las empresas del futuro, al igual que cualquier otro tipo de innovación, requiere de un ecosistema fértil para prosperar, y los emprendedores en este campo dependen de apoyo para desarrollar sus ideas y de acceso a la financiación para poder llevar a cabo su ejecución. 

 

Al final del primer trimestre de 2014, el Consejo Europeo señaló que la Unión Europea necesitaba de una base industrial fuerte y competitiva, tanto a nivel de producción como de inversión, para que pudiera actuar como motor fundamental de crecimiento económico y creación de empleo. Esto organismo incidió entonces en que la eficiencia de los recursos constituía uno de los aspectos más destacados a la hora de abordar la competitividad y que, por tanto, instaba a llevar a cabo esfuerzos sostenidos con el fin de moderar esos costes energéticos mediante la inversión en eficiencia energética y gestión de la demanda a lo largo de la cadena de valor y en la fase de I+D. Se estima que la utilización eficiente de los recursos a lo largo de las cadenas de valor con la aplicación de soluciones técnicas adecuadas podría comportar una reducción de necesidades en cuanto a materias primas de entre un 17 y un 24% de aquí al 2030. En la misma línea, si el 60% de los residuos susceptibles de ser reciclados, compostados o reutilizados se gestionasen supondría dejar de echar a perder recursos valiosos y crear oportunidades de negocio para pymes que podrían idear, fabricar, comercializar y aplicar productos, soluciones o servicios ecológicos en este sentido. 

 

Este plan de acción ecológico se centra en las acciones a nivel europeo que están diseñadas para adaptarse a las actuales iniciativas “verdes” de apoyo de las pymes a escala nacional y regional, para reforzarlas. Entre las medidas de apoyo está el facilitar la información; crear capacidad; fomentar la cooperación y creación de redes; ofrecer financiación directa, y facilitar el acceso a la financiación. Es posible localizar información concreta al respecto en este enlace.

 

 

La ecologización de las pymes conduce a una mayor competitividad y sostenibilidad, puesto que la optimización de la eficiencia de los recursos en el marco de las pymes supondría una reducción significativa de los costes de producción y un aumento de la productividad. Un potencial del que, manifiesta la Comisión Europea, pocas pymes europeas son conscientes. Del mismo modo, este organismo reconoce que las que sí llevan a cabo esfuerzos en este sentido, no gozan de suficiente respaldo. 

 

De un lado, las mejoras relativas a la eficiencia en el uso de los recursos requieren de un conocimiento especializado del que habitualmente no disponen las pymes y, por tanto, precisan de asesoramiento para detectar los beneficios a medio y largo plazo de integrar innovaciones en procesos y organización para optimizar la eficiencia de los recursos. Y, de otro lado, las pymes que buscan financiación para este tipo de proyectos se encuentran con que para los intermediarios financieros son catalogados de “alto riesgo”. En el primero de los casos el plan remite al Centro Europeo de Excelencia sobre Utilización Eficiente de Recursos, que se creará en 2015; el Eurobarómetro sobre “Las pymes, la eficiencia de los recursos y los mercados ecológicos”; la red Enterprise Europe (EEN), y a las autoridades de gestión de los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos y, en el segundo de los casos, a los sitios Web de la Comisión Europea en materia de financiación, que serán convenientemente actualizados para dar respuesta a este tipo de pymes; al Banco Europeo de Inversiones (BEI), o los PF4EE o instrumentos de financiación privada para la eficiencia energética.

 

A pesar de los potenciales beneficios derivados de la innovación en eficiencia energética y de la reducción de producción de residuos, advierte la Comisión Europea, “se observa una combinación de obstáculos reglamentarios, culturales, institucionales, y técnicos, que siguen impidiendo una acción más eficaz y la creación de redes entre empresas, lo que también impide el aumento de le eficiencia en el uso de los recursos”.