Los depósitos para agua caliente Lapesa cumplen la normativa ErP para 2017

La directiva de Etiquetado energético, ELD, indica que el consumo de energía será clasificado e incluido en una etiqueta que deberá suministrarse junto al producto afectado, obligando a clasificar los depósitos de agua caliente en función de las pérdidas estáticas en vatios, obteniéndose las clases energéticas A, B, C, D, E. Mediante el etiquetado, se presenta una información normalizada sobre la indicación del consumo de energía.

La directiva de Ecodiseño, ErP, se encarga de definir los criterios mínimos de ecodiseño para todos aquellos productos relacionados con la energía. Su objetivo principal es el de reducir el impacto medioambiental de los productos, incluido el consumo de energía durante su ciclo de vida, y exige que los depósitos de agua caliente cumplan con unos requisitos mínimos de eficiencia, a modo de pérdidas estáticas. 

Una de las principales cualidades de los depósitos acumuladores lapesa es su eficiencia energética debido al excelente aislamiento térmico aplicado en fábrica para todos sus modelos. Una vez concluido el proceso de fabricación e inspección del recipiente, se aísla el depósito mediante poliuretano rígido inyectado en molde, PU, obteniendo una capa aislante regular en toda la superficie del depósito que forma un bloque compacto, sin fisuras ni puentes térmicos.

La regularidad en la distribución del aislamiento en toda la superficie del depósito y la densidad controlada del producto en su conjunto (45 kg/m3), junto al espesor del material inyectado, hacen de estos productos unos de los de menores pérdidas caloríficas del mercado, dotando a lapesa de una posición aventajada ante la nueva normativa ErP, la cual pone en valor los depósitos mejor aislados del mercado, obteniendo excelentes clasificaciones.

Las pérdidas de energía a través del cuerpo del acumulador medidas en nuestros productos, y reflejadas tanto en nuestros catálogos, manuales de instalación, como en las nuevas etiquetas acordes a la ELD, demuestran una vez más el alto grado de eficiencia y respeto por el medio ambiente de los equipos lapesa, situando la mayoría de nuestros depósitos en el nivel B.

Cumpliendo con la ErP en 2017

La normativa ErP define unos requerimientos en forma de pérdidas energéticas máximas admisibles para los depósitos de agua caliente, que deberán cumplirse para ser comercializados a partir del 26 de septiembre de 2017, siendo la clasificación C la máxima admisible.

Los depósitos lapesa ya se encuentran adaptados a los requerimientos que la ErP exigirá en 2017, ratificando de nuevo la política del fabricante de considerar la mejora continua y evolución de sus productos, junto a su adaptación a las nuevas necesidades y exigencias de los mercados, como uno de sus objetivos principales.

Máxima rentabilidad y eficiencia

Comparativamente, y tomando como referencia los depósitos de clasificación B, un depósito de clasificación C perderá una media de un 40% más de energía, un depósito D un 85% más, y un depósito E un 135% más.

Con los datos normalizados facilitados por los fabricantes, los profesionales disponemos de herramientas suficientes para valorar económicamente las pérdidas estáticas que se producen anualmente en los depósitos de agua caliente, observándose claramente la rentabilidad de la instalación de depósitos de agua caliente con bajas pérdidas de energía y buena clasificación energética.

En conclusión, lapesa pone a su disposición una amplia gama de productos adaptados a las nuevas normativas ErP y ELD, de obligado cumplimiento, garantizando gracias a su aislamiento térmico de alta densidad una mayor eficiencia y el máximo ahorro para su instalación.

Más información:

www.lapesa.com